La llegada del ferrocarril a la costa de Normandía en la década de 1840 originó la transformación de estos parajes en principal reclamo del incipiente turismo francés.
Patrimonio Nacional conserva dos de las tres imágenes que Gustave Le Gray tomó de la playa de Sainte-Adresse, un barrio costero al noroeste del puerto de Le Havre que a través de ellas llegaría a la imaginación del público pocos años después, gracias al crítico Alphonse Karr y a pintores como Camille Corot o Claude Monet.
La playa luce aún todo el encanto rústico de las viviendas de la población pesquera. Le Gray realizó dos fotografías en esta zona del litoral para registrar los cambios de fisonomía que ocasionaban las mareas. La primera muestra la playa de Sainte-Adresse en toda la amplitud que le proporciona la bajamar. El espectador se siente atraído tanto por los pequeños aspectos visibles del acontecer diario, en las pequeñas siluetas de los pescadores, enfrascados en sus tareas, como en el anecdótico elemento humano que, ajeno a estas, disfruta del paraje natural.
Textos: Reyes Utrera Gómez